“¡A COMER, HOY TOCA PESCADO!”

De forma general cuando toca pescado en casa, la respuesta de las y los más pequeños es “NOOOO”.

En la Platjeta somos conscientes de la importancia de comer pescado fresco de calidad y de proximidad sin dejarnos medio sueldo en la cesta de la compra. Muchas de nosotras embarcadas en este proyecto somos madres y sabemos lo que es tener que organizar lo que comeremos durante la semana, y que sea atractivo, saludable para todos los miembros de la familia y, además, económico. Por esta razón, escribimos esta entrada en el blog de la Platjeta para hacer algunas reflexiones y daros algunos consejos de como lo hacemos nosotras en casa.

Empecemos por no tratar a los peques como si no tuvieran criterio ni paladar. ¿Qué queremos decir con esto? Dejemos de ofrecerles eso que sabemos que sí que les gusta y empecemos a explorar nuevas texturas y sabores que quizá les sorprenden. Cojamos, por ejemplo, recetas que les encantan, como son las albóndigas o las varitas de pescado ultracongeladas, y las adaptamos a nuestros parámetros de comida saludable y sostenible. Podemos hacer unas albóndigas de caballa, pescado azul con gran contenido de grasas saludables i omega-3 (ver receta), o hacer unas varitas de pescado fritas con brótola (ver receta).

Sabemos que no todo el pescado tiene el mismo sabor y que quizá algún tipo de pescado azul tenga un sabor mucho más fuerte que un pescado blanco. Podemos ofrecer a nuestros hijos e hijas pescado blanco como son la dorada, la moixina (pintarroja), la brótola, que tienen un sabor suave. Estas especies se pueden cocinar de la manera tradicional o podemos hacer un procesado, como albóndigas, croquetas o canelones. Sabemos que hacer estos procesados nos toma un tiempo que casi no tenemos, pero podemos hacer mucha cantidad un día y congelar para tener para unas cuantas veces. Si hacemos partícipes a nuestros peques en las tareas de cocina, nos quitan trabajo, los involucramos en las tareas de casa y son parte del proceso de nutrición de la familia. Nos lo tenemos que tomar como un juego.

Una parte muy importante a la hora de organizar el menú familiar es la compra, tenemos que involucrarlos tanto como podamos: ir al mercado, hacer la lista de la compra, que vean qué cara tienen las merluzas, los boquerones y los pollos, que hablen con las personas que están en las paradas de los mercados y  que pregunten, si tienen curiosidad.

Todo estos consejos los podéis trobar resumidos en el siguiente tríptic.